Seguramente el lector habrá escuchado los siguientes conceptos en lo que al clima y a la protección del medioambiente se refiere: Agenda 2030, Acuerdo de París, Acuerdo de Kioto, Green New Deal,… Todos ellos se caracterizan por una cosa: El Planeta Tierra se está calentando y la culpa es de los hombres con sus emisiones de gases de efecto invernadero. Gases que según los científicos hacen que se cree una especie de capa en la atmósfera que hace que se permita pasar a los rayos ultravioleta, pero en su rebote con la tierra se queden dentro de ella provocando así un aumento de la temperatura. Esta característica es la que justifica y ampara toda una serie de medidas claramente intervencionistas enfocadas, en principio, para frenar esta influencia. Todos hemos escuchado y sufrido los famosos cánones por emisión de CO2 a la atmósfera, el establecimiento de Leyes del Cambio Climático, establecimiento de Zonas de Bajas Emisiones en grandes ciudades, etc.
"La libertad se puede entender como la eliminación de impuestos medioambientales y la implantación de incentivos fiscales para la innovación en materia de reducción de emisiones de gases nocivos "
En efecto, como liberal defiendo que todo el progreso de la humanidad es debido a la libertad. En este caso la libertad se puede entender como la eliminación de impuestos medioambientales y la implantación de incentivos fiscales para la innovación en materia de reducción de emisiones de gases nocivos tanto para la salud como para el medioambiente. También es un hecho, que es importante a destacar en este punto, es el que los consumidores cada día están más preocupados por la ecología y, por tanto, van buscando productos y servicios que cumplan con unos estándares ecológicos. Incluso, puede haber consumidores que estén dispuestos a pagar más por cumplir con dichos estándares.
En esta línea tenemos multitud de ejemplos de empresas que están cada día mas sensibilizadas con el medioambiente. Empresas como Google que en sus buscadores puede observarse que garantizan que sus servicios de búsqueda y de sistemas operativos no tienen huella de CO2. Un ejemplo de como el mercado puede hacer que las empresas cambien de actitudes. Pero el ejemplo del gigante tecnológico estadounidense no es el único. En la Unión Europea también tenemos ejemplo de esto. Uno de ellos es el gigante de la construcción aeronáutica AIRBUS. Desde los primeros modelos de AIRBUS hasta los actuales se ha reducido la huella de carbono entorno a un 30 %, incluso en algunos modelos hasta el 50% (caso del Airbus A350-1000, de largo recorrido). Esta empresa, que recuerdo esta compuesta entre otras por la antigua española CASA, está en desarrollo de la nueva línea ZERO E. Esta línea asegura la compañía que tendrá cero emisiones dado que su combustible será hidrógeno y lo que emitirá en la combustión será vapor de agua. Otro ejemplo lo tenemos en la empresa energética española Iberdrola. Empresa que desde hace mas de 10 años lleva apostando por las energías verdes como fuente de abastecimiento.
Como se puede observar en estos ejemplos, el compromiso con el medioambiente y el capitalismo no está reñido. Dentro del Capitalismo puede haber espacio para aquellos consumidores preocupados por su entorno, es lo bonito de la libertad. También estos ejemplos demuestran que el ecologismo puede incitar a la innovación y, con ella, a la generación de puestos de trabajo y progreso. Lo que no nos va a llevar al progreso es, en absoluto, las políticas intervencionistas. Hemos visto por ejemplo que con cánones al CO2 lo único que hemos conseguido es aumentar la factura de la Luz y reducir escasamente las emisiones. En el fondo, el mensaje que la ONU, la Unión Europea, el Gobierno de España y demás organismos transmiten es : “paga el canon y contamina lo que quieras”. Págalo tú que luego se lo repercutes al consumidor final.
Otra razón por la que los gobiernos deberían pisar el acelerador en lo que a innovación tecnológica se refiere son las fuertes amenazas que estamos sufriendo en Europa a costa del Gas. Recientemente hemos visto como Rusia está cortando el suministro, con lo que la oferta se reduce y al aumentar la demanda el precio del gas se encarece. Con lo que, de nuevo, el precio de la luz se dispara. Además, hay una amenaza que se cierne especialmente sobre España y, en menos medida, Francia. Esta es, las tensiones que hay entre Argelia y Marruecos. Recordemos que gran parte del Gas que recibimos en España proviene de Marruecos que a su vez proviene de Argelia. Por tanto, Europa debe urgentemente garantizarse la independencia energética. Y para garantizarnos esta independencia energética, lo mejor es apostar decididamente por la energía nuclear. Energía que nos garantiza un suministro autónomo y, ademas, una bajada del precio de la luz que permita a los consumidores apostar, vía ahorro, por productos mas respetuosos con el medio ambiente. Con lo que estaríamos creando un ciclo virtuoso que incentivaría a las empresas a invertir en innovación para satisfacer a estos clientes.
Como conclusión a esto, diremos que los gobierno deben apostar decididamente por el libre mercado y por incentivos fiscales a la innovación. Deben, en efecto, dejar de lado políticas intervencionistas como la imposición de cánones, impuestos y gravámenes. Que como se ha demostrado no garantizan una reducción de gases contaminantes. También debería facilitar la creación de centrales nucleares que, ademas, son generadores de empleo y son respetuosas con el medioambiente.