El Ministerio de Hacienda y Función Pública ha publicado hoy en su web una serie de datos correspondientes a la ejecución presupuestaria que recogen el impacto de la COVID-19 en las cuentas públicas, así como el efecto de las medidas aprobadas para combatir la emergencia sanitaria y mitigar las consecuencias económicas y sociales derivadas de la misma.
La evolución hasta agosto muestra que el déficit del Estado continúa la senda descendente iniciada a partir del mes de abril respecto al mismo periodo del año anterior como consecuencia de la reactivación económica por el avance del proceso de vacunación. En concreto, el déficit del Estado en los ocho primeros meses del año de 2021 se ha reducido un 16,8%.
Asimismo, el Ministerio de Hacienda y Función Pública también ha publicado hoy en su web los datos de déficit consolidado de la Administración Central, Comunidades Autónomas y Seguridad Social del mes de julio en términos de contabilidad nacional, que también se ha reducido un 29,6% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
A su vez, también se han publicado hoy los datos de ejecución presupuestaria del conjunto de Administraciones Públicas correspondientes a la primera mitad de 2021 (incluyendo a las Corporaciones Locales), que se reduce un 31,4% respecto a los primeros seis meses del curso anterior.
Déficit del Estado (agosto)
Hasta agosto, el Estado ha registrado un déficit equivalente al 4,18% del PIB, frente al 5,41% existente en agosto de 2020. De esta forma, el déficit se sitúa en 50.531 millones, lo que supone un descenso del 16,8% respecto a los 60.714 millones del mismo periodo del ejercicio anterior. Este resultado se debe a un robusto incremento de los ingresos no financieros del 14,4%, frente al comportamiento de los gastos, que crecen a un menor ritmo del 3,3%.
A la hora de comparar entre ambos años la evolución entre los recursos y los empleos hay que recordar que en marzo de 2020 se produjo la reversión al Estado de dos tramos de las autopistas de peaje AP-7 y AP-4 sin incidencia en el déficit, pero sí con impacto en los recursos y empleos del Estado, por un valor estimado de 1.745 millones, operación sin correspondencia en 2021.
Adicionalmente, la situación de pandemia internacional y la consecuente emergencia sanitaria que empezó en el primer trimestre de 2020, tienen también un impacto en las cuentas públicas de las Administraciones Públicas durante 2021. Un efecto provocado, no solo por la crisis sanitaria, sino por las medidas adoptadas para proteger las rentas y el tejido productivo que se han prorrogado durante este ejercicio.
Los impuestos sobre la producción y las importaciones aumentan un 14,4%
Recursos no financieros del Estado
Los recursos no financieros se sitúan en 126.204 millones, lo que supone un 14,4% más respecto al mismo periodo de 2020. Los impuestos alcanzan los 105.846 millones y crecen un 18,6% respecto a agosto de 2020.
Los impuestos sobre la producción y las importaciones aumentan un 14,4%, de los cuales los ingresos por IVA se elevan un 16,5%. Los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio crecen un 25,5% debido al IRPF, que se incrementa un 32,6%, y al aumento del Impuesto sobre Sociedades, que aumenta un 17,9%. Por su parte, los impuestos sobre el capital crecen un 125,8%, respecto al mismo periodo del año anterior. Los ingresos de las cotizaciones sociales descienden ligeramente un 1,4%.
Las rentas de la propiedad disminuyen un 3,1% respecto a 2020 como consecuencia del descenso del 12% de los ingresos por intereses. No obstante, se produce un incremento de los dividendos y otras rentas en un 4,8% debido, principalmente, al mayor dividendo recibido de Loterías y Apuestas del Estado, con 590 millones frente a 420 millones en 2020.
Los ingresos procedentes de la venta de bienes y servicios crecen un 42% hasta los 1.170 millones.
Los otros recursos no financieros aumentan un 8,8% descontada en 2020 la reversión de las autopistas mencionada.
Empleos no financieros del Estado
Hasta agosto, los empleos no financieros del Estado se han situado en 176.735 millones, cifra superior en un 3,3% a la registrada en los ocho primeros meses de 2020.
La partida de mayor volumen, que son las transferencias entre administraciones públicas, ascienden a finales de agosto a 113.512 millones, un 3,6% más que en el mismo periodo de 2020, destacando las transferencias corrientes a las Comunidades Autónomas, que se han incrementado un 0,7%, hasta alcanzar los 66.195 millones. Un aumento debido, en gran parte, al mayor volumen de recursos transferidos para hacer frente a la pandemia.
Por su parte, los Fondos de la Seguridad Social han recibido un 4,2% más recursos que en 2020, siendo necesario mencionar el aumento en un 52,6% de las dotaciones para la Dependencia, hasta alcanzar los 1.421 millones, y los mayores fondos empleados en la financiación del Ingreso Mínimo Vital.
El importe de los gastos del Estado relacionados con la pandemia ha sido de 8.039 millones, de los cuales 7.304 millones son transferencias a las Comunidades Autónomas y a las Corporaciones Locales.
La remuneración de asalariados crece un 4,4%. Esta rúbrica, que asciende a 12.861 millones, incorpora la subida salarial para este ejercicio del 0,9% frente a un incremento salarial del 2% en 2020.
Los consumos intermedios han ascendido a 3.719 millones, un 24,3% más de gasto que en el mismo periodo de 2020 debido al gasto en vacunas por importe de 931 millones, sin correspondencia en 2020.
Por su parte, los intereses devengados crecen un 1,2% hasta situarse en 15.421 millones, mientras que la cooperación internacional corriente aumenta en un 3,9%.
Las prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales aumentan un 3,7%, con un porcentaje de revalorización de las pensiones de Clases Pasivas para el ejercicio 2021 del 0,9% con carácter general, el mismo que en el año anterior. Por su parte, las transferencias sociales en especie caen un 13,5%.
Por último, destaca la formación bruta de capital fijo, que desciende un 38,5% por la operación de reversión de la AP4 y AP7 en 2020 antes dicha sin correspondencia este año.